Ramón Soler lanza una potente reflexión en este interesantísimo artículo: la corrupción no solo afecta nuestras instituciones, sino también nuestro bienestar como sociedad. Su trabajo analiza el impacto socioeconómico de esta lacra que amenaza nuestra democracia y frena el desarrollo económico, proponiendo una mirada crítica para romper la apatía ciudadana y reclamar una justicia imparcial y efectiva. “La famosa ‘Dama de la Justicia’ no lleva una venda para ser imparcial, sino para no ver la degeneración de lo que representa”, sentencia.
Los comentarios están cerrados.